Este bizcocho fino y enrollado sobre si mismo, de sabor delicado, ligero y jugoso, es perfecto para rellenar con ingredientes tanto salados como dulces. Lo más frecuente es encontrarlos o hacerlos rellenos de nata, crema pastelera, chocolate y acompañado de frutas frescas o frutos secos. Pero también queda muy bien relleno de jamón de York y queso. Puedes hacer la combinación que prefieras.
Es superfácil de hacer y lo único para lo que tienes que tener un poco de cuidado es a la hora de enrollarlo por primera vez, lo demás no tiene complicación, terminas obteniendo siempre excelente resultado.
¿Aun no has probado a hacerlo? No lo dudes y únete al club de los reposteros del brazo de gitano.
Ingredientes:Para el bizcocho;
100 gr. de harina
100 gr. de azúcar
4 Huevos
Una pizca de sal
La ralladura de medio limón
Para La decoración del bizcocho:
20 gr. de Harina
20 gr. de chocolate en polvo
Una clara de huevo
30 gr. de azúcar
30 gr. de mantequilla
Para el relleno:
250 gr. de nata para montar
3 Cucharaditas de azúcar
1 Taro de mermelada de fresa o
200 gr. de fresas frescas si estamos de
temporada
Preparación:
Lo primero que haremos será separar las yemas de las claras.
Ponemos las claras en un bol y montamos hasta que queden a punto de nieve, reservamos.
En otro bol mezclamos las yemas con el azúcar y la ralladura del limón hasta que se
integren bien.
Añadimos la mezcla de las yemas al bol de las claras muy poco a poco y vamos haciendo movimientos envolventes con una espátula para que las claras no se nos bajen hasta que todo quede perfectamente mezclado.
Por último agregamos la harina, poco a poco, tamizándola con la ayuda de un colador y volvemos a mezclar todos los ingredientes con la espátula,
con movimientos envolventes.
Para hacer el adorno, preparamos en un bol pequeño la clara de huevo, el azúcar, la mantequilla a temperatura ambiente y luego añadimos los ingredientes secos, el cacao en polvo y la harina previamente tamizados. Esto hará un bizcocho denso, que se mantendrá firme cuando dibujemos con él. Podéis hacer el dibujo que os apetezca. Mezclamos todo muy bien e introducimos en una manga pastelera, que tenga una boquilla fina.
En la placa del horno, para que el bizcocho salga del tamaño adecuado y lo más fino posible, colocamos papel de horno y lo untamos con una poca de mantequilla.
Hacemos un dibujo o como el que se ve en la fotografía o una forma geométrica, como prefieras, no te preocupes, no tiene que ser perfecto
Cuando tengas hecho el dibujo lo cubriremos con mucho cuidado con la masa del bizcocho, con la ayuda de una una espátula. Debemos de procurar que el dibujo no se deforme, y la masa quede bien extendida y con la misma altura.
Introducimos la placa en el horno que habremos precalentado a 175º, durante 15 minutos, si tenemos la posibilidad no usaremos el ventilador del horno, para que el bizcocho no suba.
Una vez se ha horneado toca enrollarlo. Esta parte es un poco más complicada pero solos necesitas un poco de maña.
Primero retiramos del horno el bizcocho y dejamos enfriar durante unos minutos. Tendremos preparados dos paños de cocina limpios que previamente habremos humedecido. Pasados unos minutos de haber retirado del horno el bizcocho, lo volcamos sobre un paño húmedo, que tendremos bien extendido. Retiramos con cuidado el papel. Cogemos el otro paño y lo colocamos sobre el bizcocho. Volvemos a voltearlos, para que el dibujo quede por la parte de fuera.
Con cuidado vamos enrollando el bizcocho con el paño, hasta el final, y reservamos en la nevera un par de horas.
Mientras tanto hemos montamos la nata, que debemos de tener bien fría para que monte bien, incorporamos el azúcar y montada. La colocamos en una manga pastelera que tenga una boca grande.
Sacamos el bizcocho de la nevera, desenrollamos y retiramos el paño, con la ayuda de una espátula extendemos la mermelada o colocamos las fresas laminadas y sobre ella la nata montada. Procuramos que el bizcocho quede bien relleno y con cuidado vamos volviendo a enrollar, pero sin presionar.
Cuando lo tengamos totalmente enrollado cortamos un paco los bordes, para que quede parejo.
Colocamos en la fuente de presentación y reservamos en el frigorífico otro par de horas, cubierto con papel de aluminio, para que no se seque el bizcocho y este quede firme y consistente.
Y listo para disfrutar.
Si tienes alguna duda, no te cortes y pregúntame.
Espero que os guste.
PD: La idea y la receta para la masa de decoración del bizcocho lo saqué de este magnífico blog, tenéis que visitarlo.
Gracias por tu receta se ve muy rica.
Gracias a ti por seguirme y solo espero que te animes a hacerlas. Besos
Precioso! Una pregunta de manipulación: cuando sacas el genovés del horno y lo dejas atemperar unos minutos, dices que lo vuelcas sobre un paño humedecido. ¿Cómo lo vuelcas sin que se rompa? Gracias
Pues pongo el paño sobre el bizcocho, coloco sobre el una tabla grande de plástico que tengo y con cuidado le doy la vuelta (como a una tortilla) Espero que te sirva la esplicación
Muchas gracias, Mariló! Tengo que probarlo :)!